A al-Hakam II le sucede su hijo HIXEM II (976-1009) de once años de edad. Los saqalibah  que formaban la guardia eslava del palacio intentan sustituir en el trono a HIXEM por un tío suyo, Al-Mugirah, pero el intento fracasa al ser eliminado el pretendiente al trono por lo seguidores de HIXEM. Tercer califa omeya de Córdoba. Nacido el 11 de junio de 965, durante su minoria de edad rigen el país, con una dura dictadura, su madre la concubina Subh de Navarra, el primer ministro Al-Musafí y el visir MOHAMED-BEN-ABU-ADHER, el más tarde llamado ALMANZOR. Se suceden las intrigas cortesanas entre altos funcionarios que rivalizan por el poder. Por otra parte, se ensombrecen aún más las perspectivas de todos los reinos cristianos.

Almanzor, comienza a maquinar para hacerse con el poder absoluto, para lo cual debe deshacerse del corregente Al-Mushafi. Confabulado por Subh, posiblemente convertida en su amante, y apoyándose en los bereberes, atrae a su círculo al famoso general eslavo Galib para lo cual se casa con su hija y, en 977, elimina al chambelán acusándolo de traición y ejecutándolo junto a sus hijos, y tras hacerse con el cargo de chambelán, iniciará el periodo conocido como la dictadura amirí.

En el reinado de HIXEM II, ALMANZOR logra imponer su autoridad en el norte de Marruecos y en el Magreb central.

En el año 978, ALMANZOR reprime una sublevación contra el califa HIXEM II. ALMANZOR goza de gran predicamento entre los cordobeses al restablecer el orden en la ciudad, acosada por ladrones y malhechores, así como en la corte.

El caudillo hispano-árabe ALMANZOR es nombrado “hachib” o ministro del califa de al-Andalus HIXEM II. A los ojos de todos se ha convertido en un dictador. Miembro de la pequeña nobleza que empezando de simple escribiente aprovechando que tenía buena caligrafía y escalando puestos en la administración desde subsecretarías como la de director de la Fábrica de Moneda y Timbre, ha llegado hasta las posiciones más elevadas. Es probable que su meteórica ascensión se deba también algo a su amistad con la esposa favorita del califa, la bella SUBH, la navarra.

ALMANZOR se convierte en en el verdadero rector de la política árabe en la Península Ibérica gracias a los éxitos conseguidos por su ejército, tanto en el Norte de Africa como contra los reinos cristianos en la Península. Así, el ejército se convierte, hacia el año 980, en el verdadero pilar sobre el que descansa el poder de ALMANZOR que gobierna prácticamente como rey absoluto relegando a HIXEM II, actual califa, al papel de mero comparsa. Así, las últimas décadas del siglo X son, en general en toda la Península, años muy difíciles a causa de las tremendas campañas de ALMANZOR.

Con la eliminación del corregente, Almanzor inicia una dictadura militar en Al-Ándalus. El siguiente movimiento realizado por Almanzor para consolidar su incipiente poder fue eliminar al general Galib, su suegro y hasta entonces aliado pero que se entreveía como su único posible rival. Para ello, en 981, planea junto al general bereber Chafar ben Hamrun una conjura que termina con la vida de Galib en la toma del castillo de San Vicente. Dos años más tarde, en 983, el propio general Chafar será eliminado por orden de Almanzor. Despejado el camino de posibles rivales adoptó el título de Al-Mansur bi-l-lah y gobernará de forma absoluta hasta su muerte veinte años más tarde,

Al morir Almanzor es sucedido por su hijo Abd al-Malik al-Muzaffar –que ostentaba el título de chambelán desde 991– lo sucedió en el poder y, aunque el califa HIXEM II ya contaba con treinta y siete años de edad, siguió estando apartado de cualquier decisión política o de gobierno. La muerte de Almanzor provocó rebeliones tanto de orden interno como de los reinos cristianos por lo que Abd al-Malik tuvo que actuar enérgicamente para sofocarlas. Así la guardia eslava (saqalibah) fue prácticamente aniquilada tras intentar derribar a HIXEM II del trono y sustituirlo por un príncipe omeya.

Y respecto a los reinos cristianos, Abd al-Malik  afianzó su posición con sucesivas campañas militares contra Galicia, León, Navarra y Barcelona lo que le valió que, en 1007, el califa le otorgara el título de al-Muzaffar (el vencedor) un año antes de su prematura muerte.

Fallece Abd al-Málik. Es sucedido en el cargo de ministro del califa, por su medio hermano, el incapaz AB AL-RAHMÁN SANCHUELO, llamado así porque su madre es hija de Sancho II de Pamplona. Su padre ha sido ALMANZOR. Ha sido tal la osadía de SANCHUELO que ha obligado al califa HIXEM II, ya reducido a mero comparsa, a nombrarle su heredero.