SANCHO y ALFONSO se apoderan tranquilamente de Galicia. SANCHO II adopta el título de rey de Galicia y se reparte con ALFONSO las tierras gallegas. GARCÍA se refugia, una vez librado de su prisión, en la corte de al-MUTÁMID de Sevilla, cuyo reino es tributario de Galicia. La avenencia transitoria entre SANCHO II y ALFONSO dura poco. El reparto entre SANCHO II y ALFONSO del reino de Galicia no satisface la codicia de ninguno de los dos y para dirimir la cuestión se emplazan para una batalla, en los campos de Golpejera, junto al río Carrión.

ALFONSO VI, hermano de Sancho II de Castilla, que disfruta en Toledo de la generosa hospitalidad de ALMAMUN, al enterarse de la muerte de su hermano, regresa a León acompañado como siempre por Pedro ANSÚREZ y sus hermanos. Allí, ante los nobles, magnates y obispos congregados, ALFONSO VI reivindica la totalidad de la herencia de su padre. Con ello se sigue el acuerdo de Golpejera, pero se olvida a GARCÍA, el hermano despojado del reino de Galicia.

ALFONSO VI el Bravo, reduce a prisión a su hermano GARCIA, que intenta posesionarse otra vez del reino de Galicia. GARCÍA, en la fecha, es encarcelado en el castillo de Luna, donde morirá en el año 1090. ALFONSO VI se anexiona Galicia, cuya extensión es muy dilatada, pues abarca el territorio comprendido entre el litoral de la Coruña y el Mondego, pasando a ser rey de Castilla, León y Galicia (1072-1109). ALFONSO VI, a continuación, comenzará la guerra contra los musulmanes.

Después de una acuerdo entre el conde de Traba y la “hermandad” y después de lograr el consentimiento de doña URRACA, en la fecha, GELMÍREZ, obispo de Santiago, corona a ALFONSO RAIMÚNDEZ, como rey de Galicia.

En Galicia, durante bastantes años, los partidarios de ALFONSO RAIMÚNDEZ (futuro Alfonso VII de León) -hijo de URRACA y de Raimundo de Borgoña, su primer marido- luchan para que éste se independice y sea coronado rey de Galicia. Así lo hacen y los partidarios del recién coronado rey de Galicia -un niño aún de pocos años- se dirigen hacia León para reclamar en su nombre la totalidad de los reinos legados por ALFONSO VI. Pero ALFONSO I el Batallador, con su habituacontundencia en las batallas, les sale al paso en Viadangos, les derrota y hace prisionero a Alfonso Froilaz. Por su parte, el obispo Gelmírez huye con ALFONSO RAIMÚNDEZ, que entrega a su madre en una cercana fortaleza mientras él continúa su huida hasta Galicia.

URRACA, repudiada ya por ALFONSO I, se enfrenta al problema de Galicia que está en manos de su hijo ALFONSO RAIMÚNDEZ. En efecto, para evitar la total independencia de Galicia, URRACA establece un pacto con el conde Traba y con Gelmírez, obispo de Santiago. Aunque este último pronto lo rompe y se muestra partidario de la soberanía del rey niño. Esto lleva a URRACA a marchar con su ejército contra Santiago.

Finalizado el período de tres años, la reina reclama para sí la plena soberanía de Galicia y establece un pacto con Gelmírez, al que otorga como señorío la totalidad de las tierras gallegas. El obispo se encarga de derrotar a los partidarios de ALFONSO RAIMÚNDEZ.

URRACA viaja a Santiago acompañada por PEDRO de Lara, tal vez ya su marido, y firma un nuevo y definitivo acuerdo con GELMÍREZ, arzobispo de Santiago -proclamada por el Papa sede metropolitana- y todopoderoso señor de Galicia.

En este día y el siguiente, las tropas españolas al mando del conde de Noreña impiden que el ejército francés de Ney cruzara la línea del río Oitaben por el puente de Sampayo, con lo que éste tuvo que abandonar su propósito de invadir Galicia.