IMPERIO DE LOS ALMORÁVIDES (1086-1146)

Total de piezas: 47

ALFONSO VII entran en Córdoba, pero pronto la abandonan ante la imposibilidad de defender la plaza.


Los éxitos cristianos, la desunión musulmana y el peligro de desembarco de los almohades impulsan a éstos a ofrecer a ALFONSO VII la ciudad de Granada. Los Ándalusíes están dispuestos a todo antes que a soportar una nueva dominación africana. En la fecha, las tropas de ALFONSO VII entran en Córdoba, pero pronto la abandonan ante la imposibilidad de defender la plaza. ALFONSO VII la devuelve a los almorávides.

Los almohades se han lanzado contra el reino de Portugal. Conquistan Tarifa, Algeciras, Jerez y Sevilla. Siguen hacia Badajoz y Lisboa.


Los almohades se han lanzado contra el Reino de Portugal. Alrededor de la fecha, ya han conquistado Tarifa, Algeciras, Jerez y Sevilla terminando con el imperio almorávide. Luego siguen hacia Badajoz y Lisboa.

Esta pieza también aparece en ... IMPERIO DE LOS ALMOHADES (1146-1248) • PORTUGAL

Ramón BERENGUER IV de Barcelona culmina la conquista de Tortosa al califa almorávide Al-Muzaffar .


Ramón BERENGUER IV de Barcelona culmina en la fecha, la conquista de Tortosa al califa almorávide Al-Muzaffar que capitula y así queda asegurado el paso del Bajo Ebro. Su obispo quedará rápidamente restaurado. Un valí árabe se refugia en la sierra de Prades, concretamente en Siurana de Prades. Este pueblo -del municipio de Cornudella (Priorat)- en la época medieval comprende desde Vimbodí y la Espluga de Francolí, al Norte, hasta Pradell de la Teixeta, Escornalbou y Mont-roig del Camp, al sur. Las rendiciones por capitulación respetaban las ciudades conquistadas, aunque se imponía una repoblación de conquista, con reparto de las zonas incorporadas y un arrinconamiento de la población musulmana. En el dominio del territorio, la nobleza feudal desplaza a la aristocracia militar musulmana, y tanto Tortosa, como Lleida, asumen inmediatamente un gran peso socio-económico dentro de la dinámica urbana bajo-medieval. El dominio señorial es repartido, y otorgado a la Orden del Temple y a Guillem Ramon de Montcada.

El reino almorávide de Hispania entra en decadencia a causa de los almohades y de la presión de los reinos cristianos.


El reino almorávide de Hispania entra en decadencia a causa no sólo de la extensión de los almohades por el sur de la península, sino también por la presión de los reinos cristianos del Norte, y el descontento de la población sometida a los almorávides por el aumento de los impuestos y la intransigencia religiosa. Este hecho da lugar a la aparición de nuevos reinos de taifa y una nueva expansion de los reinos cristianos.

Los almohades erigen a Sevilla como su capital y se proclaman los nuevos dueños de al-Ándalus. Los almorávides se concentran en las Islas Baleares.


Los almohades están instalados en la Península Ibérica desde 1147. En la fecha erigen a Sevilla como su capital y se proclaman los nuevos dueños de al-Ándalus, obligando a los almorávides a concentrarse en la islas Baleares. Los almohades esgrimen argumentos de pureza y vivificación religiosa parecidos a los de los almorávides. También los almohades, al igual que los almorávides, gobiernan desde Marrakech. Son grandes constructores y también se rodean de los mejores literatos y científicos de la época.

Los almohades se adueñan de Valencia expulsando a los almorávides. Tampoco estos nuevos invasores sabrán atraerse el fervor del pueblo.


Los almohades se adueñan de Valencia expulsando a los almorávides. El territorio islámico peninsular vuelve a estar unificado por otro imperio bereber. Tampoco estos nuevos invasores sabrán atraerse el fervor del pueblo, lo que será aprovechado por las familias indígenas.

Esta pieza también aparece en ... IMPERIO DE LOS ALMOHADES (1146-1248) • VALENCIA (Hasta 1982)

El reino almohade se apodera del archipiélago balear.


Las Islas Baleares -donde se han refugiado los almorávides- entran en confrontación con el reino almohade que en el año 1202 se apodera del archipiélago. Las sucesivas dominaciones de las Islas han dejado fuertes fermentos de disensión que facilitarán posteriormente la conquista catalana.