REINO FRANCO MEROVINGIOS (420-751)

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MerovingiosREINO FRANCO MEROVINGIOS (420-751) Reino de los francos. Denominación historiográfica del reino germánico de los francos que traspasaron el limes  del Imperio romano en el siglo V aprovechando la decadencia de la autoridad romana en las Galias, durante la denominada época de las invasiones. De entre todos las tribus en que se dividían los francos, fueron los salios, encabezados por Clovis o Clodoveo I, los que lograron eliminar toda competencia y aseguraron el dominio de sus líderes, convertidos en dinastía merovingia.

La conversión de CLODOVEO supone para los francos la amistad y el apoyo de los emperadores orientales.


La conversión del pueblo franco no tiene lugar porque cada individuo haya examinado y haya comprendido y aceptado el contenido de la fe que se le ha ofrecido y después se haya decidido; es en el fondo, la decisión de seguir al rey lo que provoca y determina la aceptación de la fe cristiana en virtud de esas relaciones primitivas, íntimas, características de los germanos, entre el caudillo y sus súbditos. La Iglesia primitiva tenía que ganarse a cada uno individualmente; la conversión de los germanos se hace en masa. La conversión del príncipe supone la conversión de su pueblo. Son razones de vasallaje. La conversión al cristianismo del jefe de los francos CLODOVEO inclina a la jerarquía católica y a la población romana preexistente a favor de éste, con lo que la posición visigoda en los territorios galos se va debilitando. La conversión supone para los francos la amistad y el apoyo de los emperadores orientales. Los católicos, teniendo a uno de los suyos como soberano, ya no mirarán tanto hacia Constantinopla. CLODOVEO es su nuevo Constantino.

No todas las regiones ocupadas por los francos se hicieron cristianas: Bélgica, Frisia…


No todas las regiones ocupadas por los francos se hicieron cristianas, ni menos todos los francos. En el mismo corazón del reino franco de aquel entonces, en la actual Bélgica y en las regiones limítrofes continuó durante mucho tiempo manteniéndose firme la religión pagana, hasta bien entrado el siglo VII. E incluso en otras, como Frisia, que todavía no habían sido plenamente conquistadas, el paganismo se mantuvo hasta bien entrado el siglo VIII. De hecho, el cristianismo masivo se iniciará en el 630 con el apoyo de los monjes celtas. (En algunas regiones, como Frisia, que todavía no han sido plenamente conquistadas, el paganismo se mantendrá hasta bien entrado el siglo VIII). Aunque de alguna manera, el cristianismo pasa a ser la religión oficial del reino de los francos, los usos y costumbres paganos pervivirán junto al cristianismo más de 200 años. La cristianización definitiva se atribuirá al monje Bonifacio, más tarde obispo, cuya vida activa se sitúa a comienzos del siglo VIII.

CLODOVEO vence a los burgundios en la batalla de Oucha, cerca de Dijon.


Las disensiones en el reino burgundio -tribu a la que pertenece la esposa de CLODOVEO y que se ha apoderado de la Galia oriental- llevan a CLODOVEO a intentar su expansión a costa de este reino. GODIGISELO, traiciona a su hermano, el rey GUNDEBALDO, en beneficio de CLODOVEO, que vencerá a los burgundios en la batalla de Oucha, cerca de Dijon. GUNDEBALDO -que logra conservar el trono gracias a la ayuda visigoda- aceptará una alianza con CLODOVEO. Hará asesinar a GODIGISELO. CLODOVEO, con una firme base en la Galia septentrional, continuará expandiendo sus dominios.

Clovis I, rey de los Francos, recibe el bautismo y abandona Tournai para ir a París.


En los alrededores del año 500, CLODOVEO I, rey de los Francos, recibe el bautismo y abandona Tournai para ir a París. No todas las regiones ocupadas por los francos se hacen cristianas, ni menos todos los francos. En el mismo corazón del reino franco de aquel entonces, en la actual Bélgica y en las regiones limítrofes continúa durante mucho tiempo manteniéndose firme la religión pagana, hasta bien entrado el siglo VII.

Ley sálica. Recopilación de los usos y costumbres de la cultura de los francos salios.


Las leyes sálicas, constituyen un cuerpo de leyes promulgadas a principios del siglo VI por el jefe de los francos, CLODOVEO I. Debe su nombre a la tribu de los Francos Salios. Sera la base de la legislación de los reyes francos hasta que en el siglo XII el reino de los francos desaparecerá, y con él sus leyes. Este código rige las cuestiones de herencia, crímenes, lesiones, robo, etc. y es un importante elemento aglutinador en un reino como el franco, compuesto por varios grupos y etnias. Una parte muy concreta de este código sobrevivirá, a los reyes francos, y pervivirá en la historia europea durante varios siglos: se trata de aquella que prohibe que una mujer herede el trono de Francia, e incluso que pueda transmitir sus derechos al trono a sus descendientes varones.

ALARICO II se convierte al arrianismo. CLODOVEO I, católico, tiene una excusa para declararle la guerra.


ALARICO II, rey visigodo, se convierte al arrianismo; este hecho proporciona al jefe de los francos, CLODOVEO I, que es católico, una excusa para declararle la guerra. Éste último cruza -en la primavera del 507- el río Loira y derrota -apoyado ahora por los burgundios- a los visigodos en la batalla de Vouillé, cerca de Poitiers, en la que muere el rey visigodo a manos del propio CLODOVEO, poniéndose así fin al reino visigodo de Tolosa (Aquitania) -a pesar de la enconada resistencia de algunas ciudades como Arlés, Narbona y Carcasona- que es incorporado al dominio franco.

Los francos después de Vouillé, libran una guerra contra los turingios.


Los francos que en la batalla de Vouillé, han vencido a los visigodos, libran, a continuación, una guerra contra los turingios (al sur de la actual alemania). Tal circunstancia es aprovechada por los vascones de la zona sur de los Pirineos, para realizar diversas incursiones en Aquitania.

Los ostrogodos de TEODORICO el Grande prestan ayuda a sus hermanos de sangre: los visigodos.


La Galia Narbonense (o Septimania) resiste al empuje de los francos gracias a la ayuda que los ostrogodos de TEODORICO el Grande prestan a sus hermanos de sangre -visigodos- y en defensa de los intereses del nieto de TEODORICO -hijo de Alarico- Amalarico. En efecto, muerto Alarico (507), TEODORICO regenta el reino visigodo (La Septimania y la Tarraconense y Cartaginense en Hispania) y persigue a GESALEICO, que ha usurpado el trono. La Septimania que comprende las siete diócesis dependientes del Arzobispado de Narbona: Carcasona, Lodève, Béziers, Nimes, Elna, Magalone y Agde- se integrará al resto de la península Ibérica.

CLODOVEO I es reconocido como rey de los francos estableciéndose en París su capital.


Los francos ripuarios reconocen a CLODOVEO I, en la fecha, como rey de todos los pueblos francos estableciéndose en París la capital de los francos. Es tal el poder del reino franco, ahora y en los siglos que seguirán, que la Galia será la única provincia occidental que perderá su nombre. Dejará, pues, de ser la Galia para convertirse en “Francia” la tierra de los francos (que es precisamente como se llama en alemán: “Frankreich”, reino de los francos). CLODOVEO I fomentará el posterior desarrollo del sistema feudal al crear el cargo de conde, establecer la herencia real, confirmar las competencias reales en el nombramiento de los obispos y su derecho sobre las propiedades de la Iglesia o imponer las normas del derecho sálico. De esta manera las bases del feudalismo se plantean ya en pleno siglo VI al igual que harán los visigodos.

Los francos ripuarios reconocen a CLODOVEO como rey de todos los pueblos francos.


Los francos ripuarios reconocen a CLODOVEO como rey de todos los pueblos francos.