FELIPE II el Prudente (Rey de España) (1556-1598)

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FELIPE viaja para encontrarse con su padre. MAXIMILIANO queda en Castilla como regente transitorio.


FELIPE decide encontrarse con su padre al que no ve desde hace más de cinco años. La armada que trajo a MAXIMILIANO dándole escolta hasta España, es ahora la misma que conduce a FELIPE al encuentro de su padre y a hacer valer mediante su presencia los derechos sucesorios al imperio germano. MAXIMILIANO queda en Castilla, como regente transitorio, en compañía de su esposa.

El príncipe FELIPE se reúne con su padre CARLOS (V) en Bruselas.


El príncipe FELIPE -en la fecha- se reúne con su padre CARLOS (V) en Bruselas. El emperador ya se siente viejo y enfermo, pero aún puede reunir fuerzas para viajar con su hijo por todas las provincias neerlandesas y buena parte de Alemania.

Carlos V, decreta que las 17 provincias de los Paises Bajos sean vinculadas al reino de Castilla.


CARLOS V, por una Pragmática sanción de este año, decreta que las 17 provincias del Círculo de Borgoña o Países Bajos, sean vinculadas al reino de Castilla, que al cabo de poco tiempo debía heredar su hijo FELIPE. La integración del conjunto de los Países Bajos en la soberanía de la Corona de Castilla significaba sustraerlos al Imperio alemán, a sus tribunales de justicia y a las decisiones de la Dieta Imperial. Pero CARLOS V no había querido uniformizar los distintos reinos de su imperio y por eso preservó también en este caso, la personalidad de todos ellos, potenciando en los Países Bajos el protagonismo de la nobleza (los Orange, Egmont, Berghes, Montmorency…) en el Consejo de Estado, en el Consejo Privado y en el de Finanzas, así como en las asambleas de las provincias (Estados Particulares) y en las del conjunto de todo el país (Estados Generales). El gobernador, por otra parte, representaba al rey, siendo siempre una figura relevante en la corte. Y, por fin, el “stadhouder” (“estatúder” en castellano) era el encargado de las fuerzas armadas en cada una de las provincias que poseían un ejército propio.

Orden de sucesión de CARLOC (V): FERNANDO, su hermanoi; FELIPE, su hijo; MAXIMILIANO, su sobrino.


Se reúne la Dieta en Augsburgo. El resultado final es: FERNANDO -hermano de Carlos-, FELIPE -hijo de Carlos- y MAXIMILIANO -hijo de Fernando, sobrino, por tanto de Carlos- sucederán, en ese orden, a CARLOS (V). MAXIMILIANO, avisado por su padre, abandona repentinamente España y se presenta en Augsburgo a defender sus derechos. El tema queda planteado en los términos acordados pero sin que nadie decante con claridad el resultado hacia alguna de las facciones en litigio. Se decide esperar a que el tiempo lo resuelva.

MARÍA I Tudor necesita el apoyo de su primo CARLOS (V) para restaurar el catolicismo en su país.


MARÍA I Tudor necesita el apoyo del emperador CARLOS (V), su primo, para llevar a cabo la tarea que se ha impuesto en el trono: la restauración del catolicismo en su país, poniendo fin al cisma. A su vez, CARLOS (V) ve la posibilidad de una alianza con Inglaterra, que le permita aislar en un cerco de hierro a su tenaz enemiga, Francia. Un compromiso matrimonial entre la nueva reina de Inglaterra y el príncipe español, pese a la gran diferencia de edad entre ambos, trece años, parece el mejor sello para semejante alianza. CARLOS (V) hace a su hijo FELIPE rey de Nápoles para que se halle en pie de igualdad con MARÍA I y, esta más que posible boda, lo sea entre reyes. En principio, el emperador CARLOS (V) ha pensado, una vez más, en la denominada vía portuguesa. Pero las negociaciones iniciadas se han interrumpido cuando en el tablero diplomático de la complicada Europa de mediados de siglo ha surgido una oportunidad de oro con la llegada al trono británico de su prima MARÍA I que durante muchos años a partir del primer divorcio del “Rey Barba Azul”, ha acompañado a su desgraciada madre en un doloroso y humillante retiro.

JUAN, infante de Portugal muere y es sepultado en el monasterio de Belén, muy próximo a Lisboa.


JUANA, hija de CARLOS I y hermana menor del principe FELIPE, casa con el infante JUAN de Portugal, pero los festejos y la alegría duran poco en la corte lisboeta. JUAN muere, en la fecha, y es sepultado en el monasterio de Belén, muy próximo a Lisboa. Fruto del breve matrimonio nacerá, en la fecha, en Cintra SEBASTIÁN. JUANA acude a Castilla en calidad de regente, pues FELIPE piensa partir para Inglaterra.

Esta pieza también aparece en ... PORTUGAL • SEBASTIÁN I (Rey de Portugal)(1557-1578)

La proyectada alianza entre FELIPE y MARIA I, anima a Sir Thomas Wyatt a organizar una rebelión.


La poca popularidad de la proyectada alianza entre FELIPE príncipe de España y MARIA I, reina de Inglaterra, anima a Sir Thomas Wyatt a organizar una rebelión que, en cierto momento, en la fecha, llega a percibirse como formidable. La reacción de MARÍA es notablemente valerosa: se dirige a la ciudadanía de Londres en el Guildhall y logra que se reúna en torno suyo, con lo que puede desactivar fácilmente la insurrección.

En la fecha, el príncipe FELIPE de España, se casa en segundas nupcias, con su tía segunda MARÍA I Tudor.


En la fecha, en Winchester, el príncipe FELIPE de España (futuro FELIPE II), se casa en segundas nupcias, por motivos políticos y religiosos, con su tía segunda MARÍA I Tudor. Ella lo amaría y obedecería “pero si él deseaba entrometerse en el gobierno del país, no podría permitirlo”. Sólo compartieron su vida quince meses (hasta setiembre de 1555 en que FELIPE II tuvo que ocuparse de la sucesión al trono de España, tiempo preciso, por otra parte, para dejarla embarazada, según él creyó -y ella también-, pero para gran humillación de María se trató de una mera suposición). Un heredero católico podría mantener a Inglaterra dentro de la Iglesia, cuando MARÍA muriese… pero no tuvo sucesión. FELIPE no la ama y es detestado por la mayor parte de los ingleses. El matrimonio durará cuatro años.

MARÍA TUDOR, consigue del parlamento ibglés la restauración del catolicismo.


El legado del papa en Inglaterra, el cardenal Pole, una vez solemnizado el matrimonio entre MARÍA I Tudor y el príncipe FELIPE de España, completa -en la fecha- las formalidades de la reconciliación de Inglaterra con Roma en el palacio de Whitehall. Pero todo ello queda en puro episodio. MARÍA TUDOR, tras haber conseguido del parlamento la restauración del catolicismo, no consigue ni la declaración de heredero presuntivo para su marido ni ayudas económicas al imperio de CARLOS (V) contra Francia. Inglaterra se halla sumida en una guerra interna de equilibrios. Los españoles que vinieron con FELIPE en más de cien navios de escolta constituyen un virtual ejército de ocupación dispuesto a entrar en combate en el momento preciso.