RAMON MUNTANER (Militar, político, escritor y cronista)

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La concepción de Jaime (futuro JAIME I el Conquistador) es un tanto novelesca.


La concepción de Jaime (futuro JAIME I el Conquistador), hijo único de PEDRO II de Aragón y MARÍA de Montpellier, es remarcado por los cronistas Desclot y Muntaner porque tiene un proceso novelesco. El rey, PEDRO II, está cerca de Montpellier hospedado en un castillo donde por la noche se hace traer una dama por gente de su confianza. La reina MARÍA conocedora del hecho, ocupa el lugar de la dama y duerme con el rey mientras a la puerta de la habitación un buen grupo reza en silencio pidiendo a Dios un buen fruto de la aventura. Por la mañana, PEDRO II tiene conocimiento del hecho y lo acepta. De aquel encuentro tan especial, con más o menos adobos legendarios, MARIA queda en estado.

JAIME I consigue la capitulación del reino de Murcia, que se ha sublevado contra ALFONSO X el Sabio.


JAIME I consigue -en la fecha- la capitulación del reino de Murcia, que sometido por Fernando III en 1244, se ha sublevado contra su sucesor ALFONSO X el Sabio. Para calmar los afanes imperiales de su yerno ALFONSO X el Sabio y tal como quedaba estipulado en el Tratado de Almizra, JAIME I le entrega, sin recibir nada a cambio, el reino conquistado, aunque en el interín ha sido repoblado, en su parte norte, por diez mil catalanes. (Según el testimonio de Ramon Muntaner, en su tiempo, en la ciudad de Murcia, en Cartagena y en otras poblaciones se habla el catalán). Por lo que parece, JAIME I está dispuesto a seguir ayudando a los castellanos en la conquista de Almería, pero sus hijos, PEDRO y JAIME (El infante Alfonso ya ha muerto), consideran que los catalanes y valencianos ya han hecho demasiado esfuerzo en balde.

ROGER de Flor, ex-pirata, caudillo almogávar, ofrece sus servicios al emperador de Constantinopla.


ROGER de Flor, ex-templario y ex-pirata, un caudillo almogávar, tiene interés en no ser entregado por sus antecedentes en manos de sus adversarios, ya que FEDERICO II de Sicilia tiene muy buena relación con la Santa Sede y por esto tiene miedo que la orden del Temple lo reclame. Ofrece, pues, sus servicios al emperador de Constantinopla (Bizancio) ANDRÓNICO II Paleólogo, que se encuentra amenazado por los turcos y tiene necesidad urgente de tropas. El emperador los acepta, y así se constituye la Gran Companyia (Societate Catallanorum) que a las órdenes de ROGER de Flor y de otros valientes capitostes se dirige a Constantinopla. Forma parte de la expedición el cronista RAMON Muntaner.

La Gran Companyia Catalana de Oriente llega a Constantinopla la capital de Bizancio.


La Gran Companyia Catalana de Oriente, llega, en la fecha, a Constantinopla, la capital de Bizancio, después de haber saqueado la isla de Cea. ROGER de Flor es nombrado, por ANDRÓNICO, “megaduque” y posteriormente, “césar del Imperio Bizantino”, que son los cargos supremos después del de emperador. La expedición consta, según la descripción del cronista RAMON Muntaner, de 39 naves en las que viajan 1.500 caballeros, 4.000 almogávares y 1.000 peones.

Ramon Muntaner reclama una política conjunta de los cuatro reyes de España, que son, escribe, d’una carn e d’una sang.


Y si los monarcas que reinan -entre otros territorios- sobre Catalunya piensan que ésta es únicamente una parte de España y no una nación, no parece que otra cosa piensan sus historiadores. En el siglo XIV, el catalán Ribera de Perpejá escribe la Crónica de Espanya, en la que señala precisamente cómo Catalunya es una parte de esa España despedazada por la invasión musulmana pero ansiosa de reunificación. Y el gran historiador catalán Ramon Muntaner reclama una política conjunta “de los cuatro reyes de España”, que son, escribe, “d’una carn e d’una sang”.

Fallece RAMON MUNTANER (1265-1336), militar de oficio, político y hombre de corte.


Fallece RAMON MUNTANER (1265-1336), militar de oficio, político y hombre de corte es para la historia un escritor y un gran cronista. Nacido en Perelada (Girona). Había participado en las empresas de Menorca y Sicilia y acompañado a ROGER DE FLOR en su expedición a Oriente. Autor de “La Crònica”, obra que empieza el año 1325 y que tiene terminada antes de acabar 1328. La cronología de “La Crònica” va desde JAIME I hasta la coronación de ALFONSO el Benigno, que el mismo cronista acaba de presenciar. “La Crónica” es la única fuente occidental que narra la expedición catalana a Oriente. Escribió tambien en Valencia y sobre Valencia.

Se publica en Valencia la versión íntegra del libro de caballerías “Tirant lo Blanc”.


Se publica en Valencia, en la imprenta valenciana del alemán Nicolau Spindeler, los 715 ejemplares que constituyen la primera edición de la versión íntegra del libro de caballerías “Tirant lo Blanc”. En el siglo XV, la desaparición de la guerra de caballería, a causa de la extensión de la artillería i la infantería, coincide con su idealización a través de la literatura. Dentro del género de caballería o caballeresco, extendido por toda Europa, “Tirant lo Blanc” destaca per la agilidad narrativa y, sobre todo, por la profundidad psicológica de los personajes y de los diálogos y por el realismo del argumento, hasta el punto que será considerado el origen de la novela contemporánea. Escrita por el valenciano Joanot Martorell, pero acabada por Martí Joan de Galba, será objeto de numerosísimas ediciones y traducciones. El personaje de este libro está inspirado en la vida de Roger de Flor, muerto en 1305, jefe de los almogávares en sus batallas contra los turcos en tierras de Bizancio y está basado en la “Crónica” de RAMON Muntaner que ha formado parte de la expedición.

Este célebre hecho de armas de Hernán Cortés se cuenta también de otros esclarecidos capitanes.


Este célebre y nunca bien ponderado hecho de armas de Hernán Cortés se cuenta también de otros esclarecidos capitanes. Agatocles, tirano de Siracusa, dio sobre la costa de África el primer ejemplo de esta audaz resolución. Asclepiotade, enviado por Diocleciano contra el usurpador de la Gran Bretaña, obró como Agatocles y fue victorioso como él. El emperador Juliano pegó fuego a sus almacenes y a las mil y cien embarcaciones ancladas en el Tigris cuando emprendió su expedición contra Sapor. Guillermo el Conquistador al abordar en Inglaterra en 1066 apeló al mismo recurso, y más de dos siglos antes que existiese Cortés, se había practicado en Galípoli por los capitanes que mandaban las fuerzas de la expedición de catalanes y aragoneses a Grecia, barrenando las galeras y demás embarcaciones, para que nadie pudiese retirarse ni dejar de batallar, como se lee en la Crónica catalana de Muntaner